Cuando estamos a punto de entrar en la nueva normalidad, voy
y me entero de que mi kiosquera se ha ido a un pueblo cerca de Andorra a
(atentas a la excusa) “visitar una tía enferma”. Conociendo a mi kiosquera y sabiendo
que en Andorra ahora mismo los spas están tirados de precio y no te quiero
contar ya el precio de las colonias, pues imagínense. Ella es capaz de haberse
hecho un ERTE a sí misma.
Mientras tanto, les comento que en Madrid sigue haciendo un
calor que te torras y que ir con la mascarilla por la calle es un poco como
poner a Terelu amordazada frente a una churrería. También les cuento que estoy
siendo tan responsable con la mascarilla que no me la quito ni para tomar el
café en el bar de debajo de casa donde deben pensar que estoy peor de lo mío de
lo que estoy.
Pero no les entretengo más con mis idioteces y nos vamos de
lleno al repaso a la mejor revista de ciencia ficción crónica social del
mundo. Esta semana debería haberse llamado “Especial: Las consecuencias del
confinamiento”. Menuda tela, señoras. Pasen y lean y que sea lo que Dios
quiera.
Una modelo que se llama CRISTINA y que es un cruce entre
Valeria Mazza y cualquier rubia random nos enseña el casoplón donde vive
junto a un marido que sonríe forzado en las fotos y un hijo con un pelazo que
es la envidia del mundo. Me llama la atención que siempre van desclazos, que
tienen tantas alfombras que si llaman “Villa Acaro” a la casa no pasaría nada y
que fíjate qué resuelta es ella que ha decorado la casa sola. Ya ven, modelo y
decoradora al mismo tiempo. Para que luego digan de las rubias. Cristina, eso
sí, ha caído en la maldición de los cojines (parece que ha atracado un “Muy Mucho”
ella sola), que la casa está rodeada de muros de setos altísimos y que “de momento
no piensa en ampliar la familia porque un niño es mucho trabajo”. Aprovecho
para mandar un beso a usted, querida lectora, que ha pasado el confinamiento
con sus tres hijos y su marido de usted a la vez que teletrabajaba e intentaba
no tirarse por el balcón. Cristina remata el reportaje comparando a su hijo con
un bolso. En la página 16 dice literalmente “Bosco es perfecto porque nos lo
llevamos a todas partes”. Menuda maravilla.
NIEVES ÁLVAREZ, que ha aprovechado la cuarentena para darle
fuego al Tinder encontrar novio, ha salido con el susodicho a cenar a una
terraza. El HOLA lo presenta como periodismo de investigación, pero esto es un
posado robado como yo me llamo Abel.
Por cierto, que ustedes ya saben que soy un escritor humilde
y les quería pedir que, si este verano piensan leer algo, que se pillen mi
nueva novela que se llama ESTO TE PASA POR INFLUENCER que es un no parar de
risas y que incluso cuenta la historia de una mujer que vive un drama por
llevar bragas estampadas. Como lo oyen.
TITA THYSSEN, que es un tía moderna y cercana que lo mismo
se encadena a un árbol que se tiñe ella el pelo en casa (no hay más que verla)
sale en el HOLA para decir que “el amor de su vida en su cuadro”. Yo, la verdad
no encontraba a su difunto marido tan feo. Pero me doy cuenta de que habla de
un cuadro cuadro que quiere alquilar anualmente porque ella tiene seiscientas casas
y 23 yates, pero de efectivo va floja y los colegios de las gemelas están
carísimos. Tita riza el rizo del “se me va la pinza” diciendo que, el cuadro en
cuestión, le ha dicho que no se quiere separar de ella. Necesito fumar lo mismo
que Tita.
Después sale una muy guapa con cara de “te voy a dar lo tuyo
y lo de tu primo” que se llama LUCÍA RIVERA y que es modelo y sale vestida un
poco como si a Cocodrilo Dundee le pones alpargatas con cuña y un bolso con
forma de cantimplora. Ella, por supuesto, lleva una dieta sana y se rige por el
corazón. Claro.
FELICIANO “en mi pene siempre es verano” LÓPEZ y su nueva
esposa random (sí, me encanta la palabra “random”) resulta que esperan su
primer hijo. La noticia no me puede dar más igual pero claro, inmediatamente he
visualizado a Alba Carrillo, vestida de franquiciada de Natur House y con una
motosierra en su casa. Porque Alba Carrillo es de esas mujeres que siempre lleva
kleenex y una motosierra en el bolso porque nunca se sabe.
Otra consecuencia de la cuarentena es que los hijos del
fallecido Marqués de Griñon han sacado a patadas pedido a la viuda de su
padre que abandone el palacio donde vivía porque lo han puesto a la venta. Para
ilustrar esto, la viuda en cuestión se ha tenido que ir a vivir (ojo al drama)
a un piso y sale en las fotos paseando a una perra con coletas por un parque
público. Solo les ha faltado titular el reportaje como “¡Felicidades, Esther!
¡Vuelves a ser pobre!”
Después salen tres actrices de una serie que no he visto en
mi vida (Las chicas del cable) posando abrazadas y vestidas de blanco. Por lo
visto no tienen planes para el verano porque “este verano es un misterio”, se
quieren con locura y que su mayor reto en la vida es “seguir adelante”. Nos
quedamos mucho más tranquilos con esto.
CHENOA es una fuerza de la naturaleza, se pongan como se
pongan. Resulta que por el Covid, la muchacha no se ha podido casar con su
novio urólogo/pibón. Esto, por supuesto, a ella se la trae al fresco porque se
ha hecho un reportaje vestida de blanco, con la risa floja y diciendo que “ella
se da por casada”. Porque sí y porque ella puede y porque a ella no le da la
gana casarse con mascarilla y yo aquí la apoyo a fuego porque besar a un
urólogo con mascarilla como que no. Piénsenlo. Y ojo, que ella va a la diana y
dice que no va a invitar a ningún ex a la boda, cosa que me parece fatal,
porque no hay nada mejor que un ex vea como tú triunfas y él no. Llego yo a ser
ella y me hago el baile nupcial con una versión rociera del “Ave María” (de
Bisbal) y en chándal. Por las risas.
Luego sale una señora de tensión facial disparatada que se
llama VEGA y el HOLA dice que es IT GIRL es Miami que es como ser IT GIRL en
Torremolinos pero con más residencias geriátricas y Paulina quedándose en causa.
Vega, que es tan normal que cocina, nos presenta una sopa fría de aguacate que
no puede tener peor aspecto.
ANA MARÍA ALDÓN, que además de ser el terror con mechas del
mundo de la moda, es la esposa de JOSÉ ORTEGA CANO, pues que se ha reencontrado
con su marido sin cejas y que sigue vistiéndose en un Bershka y que ella es
mega feliz porque ha dejado todos sus miedos en la isla. Ya verás tú cuando
vuelva a ver a su marido sin maquillar y en ropa interior. Va a ser glorioso.
Y ya nos vamos a los HOLICONSEJOS que como estamos a punto de ser desconfinados, pues necesitamos una guía espiritual para no volver a las calles como el estilista de Bigote Arrocet. Atentas a las claves de la nueva anormalidad.
-REINAS DEL ASFALTO. Si es usted pobre de solemnidad y no
puede ir a la playa este verano… NO PASA NADA. En la ciudad puede ir
modernísima con una maxi camisa y zapatillas planas. ¿Qué es usted bajita y de
muslo gordo? No se preocupe. Una casaca con abrigo a juego le va a ir de
perlas. Que haga cuarenta grados y usted se quiera morir eso ya es otra cosa.
Complete el look con un moño informal y un bolso del tamaño de una plaza de
garaje.
-Su casa también necesita cambiar en verano. Las claves son
piñas de escayola, una tostadora que vale 200 euros, una hamaca que le va a
quedar monísima en medio del salón y plantas falsas con frutas falsas. Como si
una psicópata va al Ikea y empieza a coger cosas al tun tun. Así mismo.
-EXTRA. Esto es sólo para las muy atrevidas. Si quieren
triunfar, pónganse vestidos de macramé. Pantalones de macramé. Lo que sea, pero
de macramé. Incluso un bikini de macramé que como todo el mundo sabe, es lo más
cómodo del mundo si lo que quieres hundirse en la piscina de su urba.
Les dejo que me voy a la peluquería que las greñas no son
tendencia y no quiero yo encontrarme con ustedes por las calles hecho un adán.
Les mando besos con los codos y sigan portándose bien.
www.clinicagolden.com |
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