La semana pasada les hablé de un accidente que había tenido una mujer rumana que se había caído accidentalmente encima de un bote de laca y este se había quedado accidentalmente alojado en el recto de la pobre señora. Pues bien, el escándalo hospitalario no cesa y gracias, de nuevo, a The Sun, hoy vuelvo con otra historia escatológica que nos va a estremecer por aquella parte donde termina la espalda.
Un vicario inglés se presentó en un hospital en Sheffield contando esta historia:
“Yo estaba en la cocina de mi casa intentando colgar unas cortinas y, casualidad, estaba desnudo. Accidentalmente perdí el equilibrio y me caí encima de la mesa de la cocina donde había una gran patata. Y debido al impacto, la patata me penetró accidentalmente y vengo a ver si me la pueden sacar porque en contra de lo que pueda parecer no me siento muy comodo y dar misa así es una tortura que no se hacen ustedes a la idea”.
Como lo oyen. Una patata en el culo de un religioso de Dios. Hay veces que me da mucho terror escribir de estas cosas no vaya a ser que alguien de la Conferencia Episcopal me esté leyendo y cunda el ejemplo del vicario inglés y las vendedoras de verduras comiencen a gritar como locas cada vez que vean entrar a un cura (o monja, que menudas son ellas) en la verdulería. Y esto…que sólo estamos a lunes. Qué terror.
Aqui tienen ustedes el LINK a la noticia
4 comentarios:
pobre hombre..."dar misa asi es una tortura..."...pues que pruebe a meterse un cactus, a ver que le parece....la misa, con o sin patata o cactus, es una tortura en si misma....
de todas formas,hay que ser roñoso o deseperado, con esos juguetes TAN monos que hay en los sexshops..
no creo que la misa sea una tortura de ninguna manera, y no te preocupes por la conferencia episcopal, en gran bretaña no pintan nada.
jajaja... me recuerda a http://es.youtube.com/watch?v=72ZO6w0rl6Y
Un saludo!
Tiene su lógica. Al fin y al cabo la patata es un tuber...culo.
...
Lo sé, lo sé, pero no he podido evitarlo...
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