viernes, 16 de enero de 2009

DANA ARANA: CARTA ABIERTA A MERCEDES MILA

Les juro que voy de susto en susto. Esta misma mañana cuando me estaba terminando el Cola Cao, mi hija dana se ha subido al mostrador y me ha dicho literalmente: “Oye flipao, que tenemos que hablar”. Y va la tía y me suelta un rollo diciendo que si los jueces van a la huelga, ella también y que no piensa volver a escribir sobre Gran Hermano. Y me dice que ha escrito una carta abierta a Mercedes Milá y que quiere publicarla en el blog. Así que aquí está la carta. Yo me lavo las manos.

“Querida Mercedes:
Te escribo para contarte que no voy a ver más ese experimento sociológico que presentas. Ni yo ni mis amigas. El otro día organizamos nuestra cena semanal para ver tu show (porque lo tuyo ya supera le de Martes y Trece) y nos dio mucha vergüenza lo que vimos. Y eso que nosotras estamos curadas de espanto y nos tragamos lo que sea (literalmente) con tal de organizar una fiesta en casa.
Pero el otro día se nos cayó el mito. Mercedes, la has cagado. Y nos sentimos tristes y apenadas (es un decir) porque de repente nos provocas mucho rechazo. Nosotras éramos muy pro tú, porque nos encantaba ver como se te va la pinza, esa pose de tonteo con los concursantes buenorros, esa histeria y esos tics que han conseguido que la Gemio a tu lado parezca una periodista seria y comedida. Y te has caído de lo más alto. Porque nosotras empatizamos mucho con una mujer como tú. Pero, o se te ha ido la pinza, o tus jefes están dispuestos a arruinarte la carrera o los guionistas del programa te odian, porque lo de la semana pasada no puede ser. Me recuerdas a Aznar cuando un país entero le gritaba aquello de “no a la guerra” y él se hacía el sordo. Lo tuyo es un poco así.
No te imaginas lo igual que me dan esos pobres que se meten en la casa para hacerse famosos. Y yo sé que tú tienes que vendernos la idea de que ellos quieren convivir en este experimento sociológico que no se traga nadie. Ni tú misma, porque tonta no eres. Con ese carácter tuyo, dirás que soy una gata de mierda, que las gatas no contabilizamos en sofres y que las gatas no contestamos encuestas de opinión. Pero las gatas tenemos una zarpa (querida) que nos permite apretar un botón y cambiar de canal cuando nos salga de la pencoleta, Mercedes bonita. Y vamos a usar esa zarpa para cambiar de canal y no ver tu circo y escuchar esas cosas de “no me toqueeees, no me toqueeeees” que te han convertido ya casi en un freak como los experimentados a los que nos muestras cada noche conviviendo en esa casa de plástico feo.
Un chiste, Mercedes, tiene gracia al principio, pero cuando se cuenta treinta veces, no sólo no es gracioso, sino que es una tocada de cojones (y eso que nosotras somos más de ovarios) como una catedral de grande. Se te está torciendo el gesto y esos nervios graciosos se están convirtiendo en una histeria incómoda de ver. Es más, eres capaz de bajarle el pedo al más fiestero. Y créenos, que a nosotras esa mezcla de espidifén y mojitos nos dejó de hacer efecto hace un par de semanas. Nosotras, que hemos sido lo más grande del mundo felino en cuestión de hombres y rock’n’roll, nos hemos visto convertidas en espectadoras asustadas. Asustadas por tus gritos, por tu empeño en vender una cosa imposible, por justificar lo injustificable y por hacerlo de una manera que nos da terror. Cada vez que te vemos, Lulú dice que si te pusieran un bigote serías el perfecto clon femenino de Aznar.
Y eso nos llena de tristeza y, para que engañarnos, nos toca las narices porque estábamos pensando en organizarte una cena para que vinieras a torturar al subnormal de mi padre, que sigue empeñado en decir que tú eres una periodista de raza.
Mercedes, por supuesto que hablaremos del ganador de Gran Hermano, que nosotras creemos que va a ser ese chico que dice que es modelo y nosotras pensamos que debe ser modelo de manos, porque con esa cara no le vemos un futuro más allá de los catálogos del Carrefour, un supermercado donde nosotras, que somos finas, no compraremos jamás. Esperamos eso sí (porque tampoco somos tan cabronas) que ese chico y tú sigáis teniendo una carrera espectacular y que los medios justifiquen el fin, porque si esta bajada tuya a los infiernos es para nada, pues hija Mercedes, pilla el teléfono de Raquel Mosquera porque tenéis más en común de lo que creéis.

Que tengas suerte guapa…que te va a hacer falta.

Dana Arana
(Fifí y Lulú pasan de firmar, que dicen que eres muy chunga e igual las haces algo…)”


Dana me pide que para que ustedes le entiendasn, vean este vídeo. Y yo se lo pongo.

6 comentarios:

José Jaén dijo...

Yo vi como uno de los peores momentos fue cuando Mercedes les dice a las tres: "pareceis ahí sentadas tres brujas malas" o algo así, no recuerdo las palabras. Si yo soy una de las tres le hubiese dicho "pues si parecemos aquí tres brujas será porque la dirección del programa nos ha querido sentar juntas para así parecerlo, no? entiendo que en el guión de la gala está previsto que entremos en polémica con Liz y por eso nos habéis sentado juntas, pero de ahí a que tú nos insultes llamándonos brujas va un abismo. Que nos insulte Liz o nosotras a ella lo puedo ver normal porque somos todas iguales, concursantes, pero que la presentadora nos insulte para hacer la gracia es lo peor que puede hacer como periodista y como persona." Ahí queda eso. Qué a gusto me he quedao, coño.

Anónimo dijo...

los concursantes expulsados se sientan por orden de expulsion, por lo tanto las 3 brujas se sientan juntas porque salieron seguiditas. Nadie las ha sentado asi aposta.

Anónimo dijo...

Gran post...
A mi es que esta ya me daba 'grimor' bastante antes...además de los parecidos mas que razonables con una que va de jefa en el trabajo (¿sera algo de la edad? ¿terror histérico premenopausial?)
¿oye por que no la buscas por el facebook y se lo mandas? No se si estará pero plataformas anti-Milá hay un huevo...

Unknown dijo...

Como uno es pobre y exiliado, ayer no pude ver la gala de marras, pero esta mañana he leído la transcripción de la entrevista y del lío que se volvió a formar ayer y VERGÜENZA DE TUS HIJOS es lo que sentí al leer las palabras de la Milá. Y tienes más razón que un santo, toda España gritando y ella sooooorda por completo. Creo que esta vez le pasará factura, una lástima.

Unknown dijo...

Buenas noches.

Me he visto el enlace que usted nos pone y me ha sorprendido muy gratamente el comportamiento del concursante, sabe estar calmado y razonable ante unos ataques que lo lógico hubiera sido contestar en plan verdulera (que es de lo que está ejerciendo ella en ese momento) o no poder seguir un discurso adecuado por los nervios; ella jugaba con ventaja lleva años en los medios y él es un novatillo pero sale mejor parado de la situación creada. Además ella tiene el poder de cortar cuando le place así que no estaban en igualdad de condiciones.

De todos modos ¿no será una táctica para reflotar el programa? Porque, "Cari, creo que como amiga tuya debo decirte que este año el programa va fatal".

No suelo seguir GH porque yo ya estuve en el pasado en un experimento sociológico: encerrado en unos barracones con un montón de gente que no conocía de nada, haciendo cosas absurdas por 760 pesetas al mes. Y ¡dios mío! que feos estábamos todos con el uniforme militar.

Gracias sr. Arana.

Ramsey dijo...

Es EVIDENTE que Dana tiene muuuuuuuucha razón.