jueves, 20 de mayo de 2021

SPIRAL: UNIDAD DE VÍCTIMAS ESPECIALES



Ya saben ustedes que las dos cosas que más me gustan en la vida son los donuts y las películas de miedo. Les cuento este porque mañana se estrena SPIRAL: FROM THE BOOK OF SAW y he tenido la oportunidad de verla antes de su estreno y les vengo a contar lo que me ha parecido.

Si son ustedes fans acérrimos de la saga SAW, lo primero que tienen que hacer es entrar a la sala sin prejuicios. Porque Spiral no es una precuela, ni una secuela, ni tan siquiera un spin off. Es otra cosa. Si me dicen que la película se titula SPIRAL: UNIDAD DE VÍCTIMAS ESPECIALES, les digo que mejor título no le habrían podido poner.

La peli es un procedural policiaco de toda la vida de dios con más cosas en común (guardando las distancias) con títulos como “Seven” que con la propia saga Saw. Chris Rock es la mega estrella contratada para dar vida a este ¿nuevo comienzo? cuyo nexo de unión con la saga son un par de frases y un asesino copycat (esto lo pueden ver en el tráiler, no es un spoiler)

Spiral está destinada a ser parte del multiverso Jigsaw pero rozándose poquito. Nuevas generaciones, nuevas reglas, nuevos asesinos y, sobre todo, nuevas motivaciones. Se pasa de soslayo por el racismo, las jerarquías y el abuso policial. En ese abuso se esconde el grueso de la trama que cumple con lo que promete. Una escena inicial que va a molar todo a los fans de toda la vida da paso a ese “todo es nuevo” del que les hablo. ¿Hay gore? Hay gore. ¿Hay sustos? También.

El director de varias de las secuelas vuelve a la saga con ese estilo de montaje arrollador, casi eléctrico para contar una historia de pérdidas, de bullying, del dolor de la verdad y hasta de la redención, quizá la tortura más complicada de llevar en vida.

No hay nada más fatal que tomarse demasiado en serio una saga de terror. Si nos hubiéramos tomado en serio el terror, Jason, Ghostface o Freddy Krueger no existirían. Y Spiral existe desde esa libertad y convence. Se pasa un rato estupendo, no deja respiro, no dejan de pasar cosas y de verdad, da lo que promete.

¿Lo malo? Pues aparte de algún secundario para matarse, el problema es Chris Rock, que está impostado y sobre actuado hasta casi rozar el ridículo. El rey de la comedia no termina de funcionar en el terror y ese sería casi su único lastre. Por lo demás, ya les digo que si están buscando entretenimiento de grito y palomitas, hacía tiempo que no encontraba nada tan honesto.

Eso sí, después de ver la película, me voy a pensar mucho en volver a reciclar vidrio. Cuando la vean me van a entender…

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