Que tiemblen todos los periodistas de investigación del mundo porque Belén Esteban podría estar a punto de quitarles el trabajo. Esto lo pienso yo mientras veo en el metro un zapping del programa de ayer donde la no mujer más famosa de Jesulín dice que ella sabe la verdad que se esconde detrás de la cancelación de la gira de Shakira.
He abierto tanto la boca al conocer este asunto que dos señoras en el metro han estado a punto de darme una moneda al confundirme con un tarado profesional. Ella sabe la verdad. Y además la cuenta. Les explico. Shakira ha cancelado su gira hasta el año que viene y ha puesto un comunicado en las redes sociales donde explica que una hemorragia que está tardando demasiado en curarse en las cuerdas vocales no le permite cantar. Vamos, yo me lo creo. No es la primera cantante a la que le pasa algo así y con una gira por delante o una está en forma o no hay manera de cantar tantas noches seguidas.
Pero Belén, que es la nueva Inspectora Gadget del periodismo de alto alcance dice que no. Que resulta que Shakira pagaba a famosos para que se hicieran fotos en sus conciertos y las pusieran en las redes sociales. Sí, es todo loquísimo. Y por lo visto los famosos no quieren el dinero ni los selfies de Shakira. Es para beber lejía. Entonces, ante la falta de apoyo famosil, por lo visto, toda la ingeniería que tiene montada Shakira en sus giras mundiales, pues que se ha detenido. Por unos selfies de pago. Sigo con la boca abierta en el metro. Y sigo sin explicarme por qué Belén no tiene un programa de política en el access prime time y solucionar ella sola, a golpe de mecha rubia, todo el entramado político español. Porque estoy seguro de que Belén es la única que sabe la verdad.
Alabado sea el señor.
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