El cartel al completo lo pueden ver ustedes aquí es este enlace de El Diario Vasco. Y es una pena. Las redes sociales, nos guste o no están llenas de imágenes mil veces más duras que este dibujo. Un dibujo que para mucha gente pueda resultar a primera vista, perturbadora. Y eso no lo va a discutir nadie. Todo aquello que desconocemos puede chocarnos al principio. Pero esa es la intención de la campaña, que este asunto deje de ser tan desconocido y forme parte de nuestra realidad. Saben ustedes el empeño personal que tengo en defender cualquier aspecto de la infancia. Y esto, por supuesto, incluye a los niños y niñas transexuales. La transexualidad infantil existe, muchas veces más cerca de lo que pensamos. Y necesitamos información, necesitamos saber cómo enfrentarnos a estos críos sin herir nunca su corazón. Recuerden, son transexuales, pero por encima de todo son niños.
Me llena de orgullo que esta primera campaña se haya llevado a cabo en mi tierra, el País Vasco gracias al apoyo de instituciones y sobre todo del maravilloso trabajo de la Fundación Chrysallis (@ChrisallysEH en Twitter). Quiero terminar con un dato que me ofrece un estudio de la fundación: "la tasa de intento de suicidio de los adultos transexuales a quienes en su infancia se les negó su identidad es considerablemente superior (41%) a la media, mientras que en los que si son apoyados los indicadores de calidad de vida y felicidad son similares a los del resto de la población". Por el respeto a estos niños, que al final son exactamente igual que los demas, compartan esta campaña en sus redes. La visibilidad es más necesario que nunca.
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