Quién me iba a decir a mí que iba a terminar teniendo algo en común con Sara Carbonero. Y es que mientras Sara da unos golpes de melena que tienen a media España fascinada, la misma marca que anuncia Sara me ha contratado para que salga a la calle y encuentre el perfecto movimiento capilar.
O sea, que durante toda esta semana es probable que me encuentren en algún punto de Madrid rodeado de cuatro maravillosas chicas (ver foto, tarugos) investigando sobre los hábitos capilares de las mujeres españolas, entrevistándolas e intentando encontrar a la ganadora de un concurso con un montón de premios. Es un trabajo chulo porque me paso el día entero regalando tratamientos capilares en un sitio mega chulo donde por lo visto vas con el pelo fosco y sales con una melena de vértigo. Y claro, las chicas se quedan a cuadros cuando les digo que la cosa es gratis total y que si Sara puede, ellas no van a ser menos. Así que, queridas lectoras, si ustedes pasan por la calle y me ven micrófono en mano que les asalto y me intereso por cuantas mascarillas se ponen a la semana, no se me asusten. Sara y yo les vamos a dejar hechas unos pinceles…
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