TRUE BLOOD: VAMPIRE PORN

Resulta que tengo varios amigos trastornados que llevan un tiempo diciéndome que tengo que ver una serie de vampiros que se llama TRUE BLOOD. Y resulta asimismo que los vampiros me la traen floja porque tienen una manera de matar que no me asusta nada que nada. Pero mis amigos venga a insistir en que es una serie súper moderna y que es de visión obligatoria. Y hete aquí que me la compro vía Amazon por menos de 30eurillos y he empezado a verla. Y, de verdad tengo claras dos cosas. Una, que mis amigos son unos pervertidos y unos sinvergüenzas y dos, que como en USA no se hace tele en ningún sitio.
Porque TRUE BLOOD habla de vampiros como podría hablar de esclavos, peluqueras huérfanas o dependientas de grandes almacenes. TRUE BLOOD es una serie donde la gente folla sin parar. He elegido esa palabra porque esa es, exactamente, la que mejor describe la acción. Estoy a punto de empezar el octavo capítulo y les puedo decir que ya he visto:

-Sexo interracial
-Sexo homosexual
-Sexo heterosexual
-Sexo en grupo
-Masturbaciones femeninas y masculinas
-Un hombre que tiene que ir al hospital porque no se le baja la erección
-Una virgen desvirgada a mordiscos
-Un chapero que se acuesta con sus clientes a cambio de sangre
-Un garito sadomasoquista donde hacen de todo menos escuchar a Merche

Y esto es sólo un poco de lo que pasa en los primeros siete capítulos. No me quiero ni imaginar cómo va a ser el final de temporada. Pero el caso es que TRUE BLOOD sorprende porque el guionista no se corta un pelo y sabe que se le ha ido la olla desde el primer momento, y eso es sanísimo. No se cortan un pelo y se agradece, sobre todo en un país tan rancio como USA. Es impensable esto mismo en España y con actores españoles. Porque otra cosa es el físico. Los actores masculinos parecen haber salido de un casting de porno gay y las actrices principales son un poco como de puticlub de carretera. La acción transcurre en un pueblecillo que debe tener el mejor ADN de todo Estados Unidos, porque hay que ver cómo está el personal. Y entre polvo y polvo, asesinatos y lucha de clases. Un poco como lo de blancos y negros pero con vampiros y mortales. O gays y heteros. O los del Madrid y el Barça. La verdad es que hacía tiempo que una serie no me dejaba tan sorprendido. También tengo que contarles que las interpretaciones me parecen un poco pésimas, a excepción de una negra que es total y un chico que hace de chapero gay y cocinero que va pintado como una puerta y con turbante. Si ustedes quieren carne, ni se imaginan cuanto hay. Y si alguna vez, en sus pervertidas cabecitas se habían preguntado como practicaban sexo los vampiros, les prometo que no les va a quedar ni una sola duda, porque la cosa es bastante explícita. Vamos, que después de ver esto, DRACULA de Coppola les va a parecer un espectáculo de Teresa Rabal, que también es terror, pero de otra clase.
Les pongo la promo de la primera temporada y ustedes mismos.