viernes, 27 de julio de 2018

LA VERGÜENZA


La sentencia de JUANA RIVAS me ha dado hasta miedo. Ustedes conocen los hechos. Ustedes saben lo que ha pasado. También deberían saber que el ex marido de Juana Rivas fue condenado de manera firme (no hay más recursos) por maltrato en 2009. Y ahora, por los hechos que ustedes conocen, ha sido condenada a cinco años de cárcel y a seis sin sus hijos, que ya definitivamente, están en manos de un maltratador. No lo digo yo, lo dice una sentencia. Igual que la de Juana.

El juez que dicta esta sentencia (sí, me la he leído) llega incluso a ignorar un aviso de alerta media que le remite el mismo Cuerpo Nacional de Policía con respecto a este señor y viene a decir que no es relevante. Vivimos en un país donde los de la Manada tienen 9 años de cárcel y Juana Rivas 5. Además Juana Rivas tiene que indemnizar al matratador (no lo digo yo, lo dice una sentencia) y pagar las costas del juicio. 

Eso de "la Justicia es igual para todos" ya no provoca risa. Ahora da miedo.

4 comentarios:

Panini dijo...

Hace una semana han tenido que indemnizar a una mujer que perdió a su hija, asesinada por su ex-pareja, maltratador condenado, porque el juez también decidió ignorar el aviso de que era peligroso. Sín más.
Mención especial a que encima la castiguen a estar 6 años sin ver a sus hijos. Hace falta...

jarpia dijo...

Abel, el padre de los niños fue condenado, con su conformidad, por un delito de lesiones en el ámbito familiar. Los antecedentes están cancelados y no hay más denuncias. El maltratador comete esos delitos y peores con continuidad.
Lo siento, pero si vulneras la Ley, hay consecuencias. Y en este caso no se juzgaba a su marido, se juzgaba la conducta de la Sra. Rivas.

Anónimo dijo...

Esta pareja se denunciaron por maltrato mutuamente y él acepto la condena (que alega que los hechos nunca pudieron ser demostrados) para terminar con el proceso y poder volver a ver a sus hijos. La condena actual es dura pero justa no podemos permitir que cualquier grillado grillada rapte a sus hijos

Anónimo dijo...

Me lo explica de nuevo es que los cortos no llegamos a entender a los indocumentados y temerosos