¿Lo ha visto bien? Pues agárrense, porque ORTEGA CANO, ese peligro al volante (lo dijo un juez, no yo) que resulta que defiendo la unidad de España y los tintes salvajes al mismo tiempo ha demandado a la gente de la revista porque esta caricatura le vulnera el derecho al honor. También dice su abogado que el cartel se mueve en el terreno de la mofa y el escarnio y algo así como que gracias a poner a esta señor que mató a una persona mientras conducía (lo dice el juez) y por eso fue condenado por un delito de homicidio con imprudencia grave por el juzgado 6 de lo Penal de Sevilla, pues resulta que los de MONGOLIA se están forrando a vender entradas. Como si Ortega fuese Justin Bieber o así. Y les pide CUARENTA MIL EUROS, lo que podría suponer el cierre de la revista.
En la calle, y sobre todo en los medios de comunicación, esto no ha sentado bien y existe un runrún en algunos pasillos que dicen que de repente en alguna página web muy anónima de reciente creación, podrían aparecer unos vídeos de Ortega Cano que podrían cambiarle directamente la vida. A él y a su mujer. Eso es lo que dicen. Yo, ni idea. ¿Se imaginan?
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