El regreso del canal 24 horas por el que bramaban los fans en las redes sociales no ha servido de nada, aparentemente. El programa ha dejado de interesar y sus satélites, ya ni les cuento. Ayer el debate no consiguió alcanzar los dos dígitos y se quedó casi tres puntos por debajo de la media de Telecinco.
Que un formato como GH sea la cuarta opción de la noche, y que sólo supere en espectadores a La 2 (no es broma) es un síntoma de que los tiempos están cambiando. Hoy el morbazo que antes vendían realities como este, lo sirven en bandeja los programas de política. La política es el nuevo morbo. Y luego están los espectadores de la televisión española que cada día están más envejecidos. Esa podría ser la razón por la que, a pesar de haber hecho un ruido espectacular en redes, los fans de GH ya no tienen peso alguno en la audiencias. Anoche se lo llevaron de calle los contenidos políticos de La Sexta y una peli de Tarantino. Ahí lo llevan.
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