Yo estoy muy por los lesbianismos. Y lo digo en serio. España sigue siendo un país catetísimo y el mundo lesbiano sigue bastante poco visible. Todavía se escuchan comentarios de hombres en plan "eso es porque no ha probado un buen rabo" y no se enteran de que no han probado un rabo porque no les apetece en absoluto. Ya les digo, sigue habiendo una catetez extrema para con los lesbianismos.
Por eso me hace una gracia terrible que una que quería ser monja en un reality se haya comido los mocos con Leticia Sabater en la isla esa donde el tinte abandona a gran velocidad a Bigote Arrocet. Resulta que ambas han hablado de tener una relación con una persona del mismo sexo. Y me parece todo maravilloso. Me gusta que en un programa de máxima audiencia dos mujeres puedan plantearse tener una aventura, una relación o lo que les de la gana. Y oigan, Telecinco tendrá muchas cosas que no les gusten pero hay que reconocer que en materia de television, nadie ha hecho tanto por el colectivo LGTB como ellos. Las cosas como son.
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