martes, 15 de noviembre de 2016

CARTA ABIERTA A GAS NATURAL FENOSA



Estimados Sres. De Gas Natural Fenosa:

Les escribo desde el horror y el espanto más absoluto. También les escribo desde esa España que “está creciendo tanto y además es la que más crece de Europa porque ya no hay crisis”. Les digo esto más que nada para que me geolocalicen y así sabemos todos dónde estamos. El motivo de esta carta es contarles que esta noche me han roto ustedes el corazón. Lo de que han perdido ustedes un cliente ad infinitum va implícito, supongo que me entenderán.

Les escribo porque le han cortado la luz a una abuelita de 81 años que vivía con su nieta. Hace dos meses que ustedes les cortaron la luz. A la señora no le quedó otra que alumbrarse con velas. Sí, exactamente como en la Edad Media. Y con tan mala suerte que la otra noche se quedó dormida con la vela encendida. Una vela que incendió el colchón y que provocó un incendio que finalmente la mató. ¡Qué final tan injusto para una señora de 81 años que ha tenido esa muerte por no poder pagar el recibo de la luz!

Les escribo porque estoy en shock. Porque me cuesta creer que en dos meses su compañía no ha podido investigar la precariedad de la situación de la anciana. Estoy asustado porque veo que les da igual ocho que ochenta y al final, las personas como la abuela (y yo) no somos más que un número de contrato. 

Intento mantenerme informado y en la presente quiero comunicarles que los Bomberos de Barcelona denunciaron en 2015 que el 70% de los accidentes provocados por incendios tenían que ver con hogares con pobreza energética. Si yo, que soy un ciudadano a pie me he enterado de esto, supongo que ustedes, que dominan su sector, lo saben tan bien como yo.
Y también deberían saber que somos la vergüenza europea en cuestión de ayudas a familias con esa letal pobreza energética. Eso deben ustedes saberlo como yo me llamo Abel. 

¿Qué van a hacer ahora? ¿Decir que no sabían nada? ¿En serio? Pero… ¿no hacen ustedes anuncios preciosos con familias vestidas de blanco donde nos cuentan que siempre nos protegerán del frío? Tengo el estómago revuelto. Porque no es posible que esto pase. O no es decente, que en realidad es lo que quiero decir. Por supuesto, cualquiera que lea esta carta se va a mondar de la risa al pensar que ustedes podrían tener responsabilidades penales por esta muerte. A ustedes no les va a pasar absolutamente nada. Y eso genera una tristeza de miles de personas hoy bastante más potente que su energía, por muy necesaria que sea.

Probablemente a ustedes esta carta les va a dar exactamente igual. Yo se la voy a hacer llegar vía Twitter y estoy casi seguro de que no obtendré respuesta. Pero que sepan que hoy han perdido uno de sus números. El mío. Hoy me han perdido para siempre. Es la única manera que tengo de honrar la memoria de una señora de 81 años que nunca conocí, pero que lo único que quería es no pasar frío por la noche.

Espero que puedan ustedes dormir tranquilos.

Atentamente
Abel Arana

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo,con usted,no lo podría haber explicado mejor,ojalà que se dignen a leer la carta!!!y vean de una vez la realidad en muchos hogares Españoles,me despido,un cordial saludo.

Anónimo dijo...

Una buena reflexion no hay nada mas que opinar .

Anónimo dijo...

Tengo sentimientos encontrados con este tema. Evidentemente siempre desde el respeto y dolor porque en pleno siglo 21 sucedan cosas así.
Considero en este caso que la culpa no es de esa compañía´, la cual es de gestión privada (a pesar de "vender" un producto de primera necesidad). Ellos tienen clientes, millones, y dudo que vayan uno por uno vigilando su situación (desgraciadamente). La culpa es de nuestros políticos, primero de aquellos que nos han llevado a esta situación de precariedad y abandono social, segundo de aquellos que mantienen el calor del dinero en sus bolsillos a costa nuestra, tercero de aquellos que no son capaces de favorecer políticas sociales que ayuden a los más desfavorecidos (tanto esta abuelita como muchos otros que viven en situación de pobreza absoluta). Son ellos quienes deberían gestionar estas situaciones y con los impuestos que pagamos todos ayudar (siempre vigilando para evitar que más de un jeta se beneficie, como tristemente vemos día a día; caraduras que le quitan el pan al vecino pobre de al lado y si pueden lo venden mordido para llevarse tanto el pan como la venta). La compañía esta es de gestión privada, y sí podría haber hecho un acto de voluntad con ella, pero ¿y todos los demás? ¿debe hacer lo mismo? La respuesta es que desgraciadamente "no son una ONG" (aunque con el dinero que ganan anual podrían ayudar a miles de familias en esta situación); pero el gobierno sí debería de ser esa tal ONG, porque son cientos de euros los que personalmente pago de impuestos, cientos; y como yo mucho otros. Es el gobierno quien debería ir "hogar por hogar" viendo cómo malviven muchas familias para facilitarles recursos (incluso podrían dar alguno de esos sobrecitos que tienen, prometo no preguntar, en estos casos de donde ha salido, aunque sea mío). Es el gobierno quien debería tener contacto/acuerdos con estas empresas privadas que nos malvenden a precio desorbitado productos de primera necesidad para facilitar el derecho a luz y calor dejando el candil encendido para los libros de Shakespeare. Veamos este año cuantos abuelitos y niños tienen que dormir con temperaturas bajo cero mientras otros tratan de vendernos la idea, en el discurso de navidad, que todos debemos apretarnos los cinturones, mientras el calor del hogar les avisa para decirles que la cena está ya en la mesa vestida con sus mejores galas.

Javi dijo...

Es inaceptable que ocurran estas cosas. Pero no es la compañía eléctrica la que tiene que conocer la situación personal de sus usuarios, así como no son los fabricantes de coche los que deben ver si sus clientes tienen permiso de conducir, se drogan o beben. Aquí lo que ha fallado son los servicios sociales del ayuntamiento.