Y con esta cara de panoli ha posado para la foto policial. Y es que la tontunez de Justin comienza a ser legendaria. Ha tenido que pagar 25.000 dólares para salir de comisaría y encima se enfrenta a la deportación si le condenan penalmente. Imagínense a esas hordas de fans descerebradas americanas si Justin no puede volver a actuar en playback en su país. De verdad, qué risa más floja. Por cierto...que mal ejemplo para los millones de niñatos que le siguen ¿no?
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