Hoy reconozco que estoy maligno y vengo a darles un poco de envidia. Les escribo estas líneas desde la maravillosa localidad de Ayamonte (Huelva) que es la segunda casa de mi familia. Saben ustedes que somos vascos de pro pero en Ayamonte tenemos la mitad del corazón por toda la gente querida que tenemos allí...
Y me he venido a ver a mis padres un par de días que me he podido escapar porque como este verano no voy a tener vacaciones (ya les contaré por qué) pues me hago estas mini escapadas de 48 horas y no se pueden ni imaginar ustedes qué playas, qué gente y qué de todo hay aquí. Por supuesto, les invito a todos ustedes a que vengan a conocer Ayamonte porque es una opción turística mucho menos explotada que otras del sur de España y de verdad, les prometo que el que viene repite. Hace muchos años que mi familia llegó aquí accidentalmente y ya no nos hemos ido. Ayamonte es un lujo que tenemos muy cerquita y una de las grandes desconocidas del turismo nacional. Anímense y vengan a conocerlo que esto es gloria bendita...
Nota: Los de la foto no somos mi madre y yo de paseo. Mi madre es Cindy Crawford al lado de esta señora. Pero me parecía una instantánea ideal para ilustrar el post.

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