Mientras ustedes leen esto, la sexta temporada de mi serie favorita, DEXTER, ya ha terminado en Estados Unidos. España tendrá que esperar hasta finales de enero para conocer qué es lo que pasa en la vida del investigador forense más brutal de todos los tiempos. Pero yo… yo ya he visto la temporada completa y les avanzo algunas cosillas.
Para empezar, toda la trama de esta sexta temporada gira en torno a unos crímenes de carácter religioso perpetrados por Colin Hanks (el hijo de Tom) y Edward James Olmos (el Teniente Castillo de “Corrupción en Miami”). Ambos serán conocidos como los asesinos del Día del Juicio Final y organizarán unos crímenes basados en estampas religiosas que les van a dejar con la boca abierta.
Y es que casi todo en esta temporada tiene que ver con la fe (religiosa o no). Dexter tiene que meter a su hijo en un colegio y no sabe si una educación cristiana va a ser buena para el chiquillo. Por otra parte, su hermana Debra tendrá una sorpresa laboral que no será tan agradable como ella creía gracias a las ¿malas artes? de su jefa, la Teniente Laguerta. Debra acudirá, además, durante la temporada a la consulta de una psiquiatra que conseguirá ahondar en “qué” es exactamente la clave de todos sus problemas. Y esa clave es la que les va a dejar con la boca abierta en la última escena del último capítulo. Ya les voy avisando que esta temporada termina con un cliffhanger que se van a quedar ustedes muy impactados.
La sexta temporada de DEXTER se estrena en España el 26 de enero y se la recomiendo encarecidamente, se lo van a pasar pipa y les prometo que la próxima vez que vean una Biblia… la van a mirar con otros ojos.
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