REVISTA HOLA: LA BODA DE LUIS ROLLÁN

Esto más que una crónica, yo creo que va a ser una carta abierta a las redactoras, las directoras y lo que haga falta de la revista HOLA, por antiguas y por tener un morro que se mueren. Y como voy con prisa, pues vamos al grano:

ANTIGUAS
Muy antiguas porque viven instaladas en un país de derecha lamentable porque los matrimonios entre personas del mismo sexo no existen para ellas. Los gays no se casan. Los gays no tienen “maridos” y lo de los gays no es un matrimonio. A ellas les sopla el Vuitton lo que diga la constitución española, ellas siguen viviendo una realidad absurda.
Cuento esto porque es lamentable el reportaje que realizan sobre la boda de Luis Rollán. No es cuestión de defender al señor Rollán (que no le hace falta). Lo que es feo es ver cómo han ninguneado su boda y, sin embargo, nos van a contar con todo tipo de detalles la de Alberto de Mónaco cuando TODOS SABEMOS LO DEL ALBERTO. De nuevo, realidades inventadas que alejan a la revista de cualquier tipo de contacto con la actualidad, las leyes vigentes y sobre todo, la realidad.
Esa manía por no reconocer lo obvio es ya irritante. Y me cuesta creer que un medio de comunicación internacional que pretende tener prestigio, pueda tener tan poca sensibilidad social. No se trata de hacer apología de nada, simplemente de llamar a las cosas por su nombre tan y como recoge nuestra constitución. Simplemente eso.

VAYA MORRO QUE TENEIS
Porque vosotras habéis decidido no informar sobre la boda de Luis Rollán a pesar de que sus invitados eran tres millones de veces más fotografiables que la de, por ejemplo, Chayo Mohedano. A ver cuando cojones habéis vosotras metido en una fiesta a Ana Obregón, Isabel Pantoja y Belén Esteban sin pagar un duro. Porque todo el mundo sabe que las bodas que salen en el HOLA pagadas a doblón llevan una serie de invitados de casting para que el reportaje quede más pintón.
Tenéis mucho morro porque gracias a la boda de Luis Rollán habéis publicado un reportaje cojonudo y ni tan siquiera habéis tenido la decencia de reconocer que tenéis ese reportaje gracias a la boda de dos tíos. Os da palo y los ninguneáis, pero por otro lado os aprovecháis todo lo que podéis para llenar páginas con fotos mil veces mejores que las que soléis publicar, que últimamente estáis muy de capa caída. Entre la boda de Chayo y el bolso de la Campa… estáis perdiendo mucho fuelle.
Y esta era una ocasión cojonuda para haceros las modernas y quedar fenomenal con un reportaje acojonante. Pero no. Vosotras ponéis en portada la boda de la hija de un rejoneador a la que no conoce ni su madre. Pero cuando la boda más mediática con los invitados más buscados sucede, como resulta que es una boda entre dos tíos, pues como que no habéis tenido cojones. Habéis tenido un morro enorme para aprovecharos del evento y publicar unas fotos cojonudas (repito: vais fatal de contenidos) pero no habéis tenido la decencia para reconocer el PORQUÉ tenéis esas fotos.

Y esto, en pleno 2011, os deja un poco por los suelos…