
Me fui al cine con ganas de pasar un ratillo viendo una peli de miedo de esas de toda la vida. De muy pequeño vi POLTERGEIST y guardaba un recuerdo tremendo. Alguien cometió el error de decirme que INSIDIOUS era el nuevo POLTERGEIST, y claro, estoy que echo espuma por la boca…
INSIDIOUS es una película mala, lenta y tediosa hasta la saciedad. JAMES WAN es el creador de la saga SAW, pero en cuanto se le saca de ahí fracasa estrepitosamente. No hay más que recordar aquel truño llamado DEAD SILENCE que era como la pesadilla de José Luis Moreno (muñecos asesinos de una ventrílocua) pero en mucho más aburrido. Porque Moreno y Monchito sí que dan miedo.
Entonces INSIDIOUS es una peli donde una familia se muda a una casa y comienzan a pasar cosas raras…a la media hora de haber empezado el coñazo de película. Aparentemente un niño se da una hostia enorme en un ático y el demonio aprovecha para metérsele en el cuerpo. Los padres del niño, que cae en coma pero está fenomenal, se pasan la película con cara de “¿Y ahora qué coño hago yo con esta mierda de guión?” hasta que aparecen dos cazafantasmas que son de un patético asombroso acompañados por la vieja en tetas de ALGO PASA CON MARY que aquí hace de médium rollo la de Jordi González pero con menos tetas.
Hay que sacar el demonio del cuerpo del chiquillo o hay que traer al chiquillo de un plano astral desconocido. Imagínense mi excitación. Solo les digo que al salir del cine llego a encontrarme a Fernando Esteso y Andrés Pajares y comienzo ahí mismo una campaña para que les den dos Oscars honoríficos.
INSIDIOUS es un coñazo que ya han visto mil veces porque no aporta absolutamente nada y encima tiene la osadía de terminar de una manera tramposa como avisándonos de que podría haber una segunda parte. Vayan a la puerta del cine y griten ATRÁS SATANÁS con todas sus fuerzas…
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