EL PRIMER ALBUM DE ROMY LOW

La pasada semana salió a la venta en formato digital el primer disco de ROMY LOW, una artista de la que les vengo contando cosas desde hace unos cuantos días porque este blog de ustedes ha decidido apoyar su carrera. Romy me tiene a cuadros escoceses y hoy les traigo la crítica del disco canción por canción.


AGRESSIVE BOYZ
La primera voz es un medio tiempo que deja clarísimas las intenciones del álbum: Romy Low tiene una proyección internacional enorme. Tiene la voz necesaria para cantar esta canción que alterna el r’n’b más comercial con el pop anglosajón. Me sobra la voz del rapero totalmente, aunque es probable que a la hora de grabar un clip, algo aporte. Un tema donde no arriesga pero tampoco queda mal. No es un single.

B4N
De nuevo una producción vocal excelente que recuerda un poco a los trabajos de la factoría de Max Martin (Pink, Britney, Kelly Clarkson, etc.). Técnicamente es perfecto, pero en la radio fórmula europea van a pensar que está producido en el 2001.

BLOW ME UP
Aquí se suelta el pelo y se hace prima hermana de Gaga. Es más, a los fans de Gaga les va a fascinar el tema. Suben las revoluciones y está clarísimo que Romy es una artista capaz de hacer bailar a medio mundo si ella quiere y los dioses le ayudan. Esta sería la parte eurobeat de Gaga, para que me entiendan ustedes. Podría perfectamente ser un single.

I’VE BEEN WAITING
La balada que demuestra que ESTA CHICA SABE CANTAR. De nuevo se acerca una barbaridad a Britney y tiene un potencial comercial irresistible de verdad. Les tengo que decir que no tengo los créditos de composición de este disco pero parece que alguien se ha preocupado de encontrarle las canciones necesarias. Gustará o no, pero es impecable.

LITTLE MISS FLAPPER
ACOJONANTE. De verdad, es una de las mejores canciones de pop que he escuchado en mucho tiempo. Esto es lo que Soraya debería estar haciendo, para que me entiendan. Una verdadera declaración de intenciones en forma de trueno. Un estribillo irresistible, absolutamente internacional. Esto en manos de, digamos, Cheryl Cole, vendería millones de singles sin duda alguna. Por cierto, es una versión diferente a la del vídeo.

LOVERS
Una balada de relleno y hasta este momento, la menos inspirada en lo que llevamos de disco. Ella está bien, la canción está bien y en realidad no hay nada que reprochar, pero no me emociona.

ON MY LIPS
Volvemos al electro r’n’b donde Romy se luce mejor que en ningún otro sitio. Me recuerda muchísimo a algo y no sé qué es. Aquí la producción y los cambios de ritmo me dejan un poco frío. La veo poco atrevida para lo que podría ser. Necesita remixes urgentemente.

STILL LOVING YOU
Lo último que uno se espera. Un cover de Scorpions que va a hacer a Lara Fabian pegarse dos tiros por no haberlo grabado ella antes. Es un dúo con un tenor. Habrá a quién le emocione. A mí el temor me sobra porque a ella la veo enorme. Y ya queda clarísimo que esta chica CANTA DE COJONES. Más claro no se lo puedo contar, es una voz perfecta para el pop.

SUITCASE
Romy sabe que hay un público gay esperándole con los brazos abiertos, y esta canción les va a encantar. Se pone cochina (es un decir) cuando quiere derretir los micrófonos y les juro que hay giros en su voz en que me recuerda a Stevie Nicks, de Fleetwood Mac. Y eso es enorme. Lo único negativo es el estribillo, tenía que haber sido inmenso y no llega a serlo.

TAKE THE MONEY AND RUN
Si no fuera por la personalidad de la voz, esto podría ser un mega éxito de Kate Ryan. Es puro pop sin concesiones. Tiene deseos de agradar y de que los fans canten sus canciones. Es una canción descarada y muy graciosa. Romy sigue queriendo que bailes, que lo sepas.

VOICES
De nuevo se aparece la sombra de Max Martín y me parece alucinante que este sea un disco “made in Spain”. Aquí la producción está inspirada, es divertida. Ella abusa un poco de los efectos vocales pero claro, estamos en la época del autotune y todo se consiente.

YOU DIDN’T BREAK ME
Igual de moderna que es en los medios tiempos, cuando se trata de baladas es absolutamente clásica, lo cual es una cosa buenísima. Un buen piano y una buena sección de cuerdas acompañan a una interpretación magistral. Para explicarme bien, les diré que esta canción es el delirio de cualquier eurofan que vibra con las baladas de Carola.

RESUMIENDO
Hace un par de meses no tenía ni idea de quién era esta chica y ahora mismo estoy a cuadros. Recuerden que no puedo con el 99% del pop español y este es un disco del que sentirse orgulloso. Se ven las influencias por todos lados, pero han ido a apostar por una producción a la altura de la voz de la cantante. O sea, alta. Romy Low es un nombre que debería quedarse en nuestra memoria y permanecer ahí durante mucho tiempo. No conozco a Romy Low, ni soy su amigo, pero les aseguro que este disco da cien patadas al de, por ejemplo, Cheryl Cole. Un disco como el de Romy Low (igual que pasaba con el de Strazz) no sólo es un soplo de aire fresco, es la esperanza de que, quizá, si alguien apoya proyectos así, igual cualquier día de estos nos encontramos a una artista española petando en toda Europa. Ojalá sea ella.

Pueden ustedes pillarse el disco pulsando AQUI