La vida es una cosa extraña. Esta mañana he desayunado con la muerte de Antonio Puerta, el presunto agresor de Neira, ese hombre que conduce borracho y colabora en Intereconomía. Antonio Puerta saltó a la arena pública por agredir a Neira, pero como les cuento, la vida es extraña. Muy extraña.
Que Neira es un ser desagradable, soberbio y detestado por una gran mayoría de personas no es noticia. Es una realidad. Ha pasado de héroe a villano por sus propios méritos. Esta misma mañana, la popular Ana Rosa Quintana decía en su programa “lo mejor que puede hacer Neira es callarse ahora”. Y es que Antonio Puerta, el fallecido, aún no había tenido la resolución definitiva de su juicio. Y es que se trata de saber si Neira entró en coma por la paliza de Puerta, o por una mala atención médica. En la calle se dice (yo no sé si esto es verdad o no) que la culpa la tienen los médicos de la Comunidad de Madrid. También dicen que Esperanza Aguirre le dio un cargo para que la denuncia no prosperara. Es decir, un asunto muy turbio.
Esperanza Aguirre se ha deshecho de Neira y la vida se ha deshecho de Antonio Puerta, un hombre con una terrible adicción a las drogas que parece ser que es lo que se lo ha llevado al otro barrio. Y en estos momentos, me rasco la cabeza pensando que igual (y esto es una suposición) nos enteramos de que Neira entró en coma por la mala atención médica y no por la paliza. Y ese día sabremos que es muy extraño que alguien permanezca en la cárcel un año y medio por una paliza, como ha estado Antonio Puerta.
Una serie de extrañas circunstancias ha colocado a las piezas de este juego en su sitio correcto del tablero con el paso de los días. Miren que soy una persona que se opone a cualquier tipo de violencia y las imágenes hablaban clarísimo sobre la agresión de Antonio Puerta. Pero aún así, nunca me creí a Neira como héroe. Algo andaba mal en ese señor. Y el tiempo ha demostrado que es mucho más verdugo que víctima. Sin embargo, Antonio Puerta sí ha demostrado ser una víctima de sí mismo y de las drogas. Una cosa es ser un enfermo y otra ser una mala persona, no sé si me entienden.
¿Sabremos algún día la verdad sobre el coma de Neira? ¿Se mantendrá callado el conductor borracho o hará gala de su falta de educación y su soberbia de nuevo? Y sobre todo… ¿Cuánto dinero está Telecinco dispuesto a pagar por la primera entrevista de Violeta Santander?
El tiempo, como siempre, tendrá la respuesta.
2 comentarios:
A mi me ofendio mucho que lo primero que grito Neira fue: Maricón! y le den todos los honores civicos. Yo no soy de esos tiquismiquis pero me aterra que lo peor que le venga a la cabeza a alguien sea eso. Si añadimos que se considera una falta al honor atribuir homosexualidad... para mi es un problema mucho mayor que el que se planteo con el matrimonio gay, esto si que nos erosiona.
Puerta era un cocainomano maltratador majisimo que tuvo la mala fortuna de que su puño golpeara al facha alcoholico de intereconomia que se metió en medio donde nadie le llamaba, esto es, en una paliza doméstica muy moderna. Encima va el facha ese y se queda medio muerto por obra de Esperanza Aguirre que le inyectó una jeringuilla con aire..en resumen es eso, no?
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