Pues sí, es mala de cojones, pero un rato entretenida. Y es que una película como esta solo la podían haber hecho en USA. Porque cuenta la historia de un pavo que se convierte en un terrorista porque no está satisfecho con un pacto que un fiscal del estado hace con el asesino de su mujer y su hija. Y claro, se carga a ciento y la madre. Y lo curioso del caso es que la película nos lo muestra como un martir o algo así. Y yo creo que es porque en USA ya hay un desquicie que no es normal. Y claro, que un padre mosqueado con una resolución judicial se convierta en un asesino sanguinario que, por ejemplo, se carga a seis abogados de golpe reventando sus coches con bombas, pues es de lo más normal y corriente.
Como puntos buenos de la peli les digo que Gerald Butler enseña las nalgas en todo su esplendor que, créanme, es mucho. Santo Cristo de la Luz...¡qué nalgas!. Y también hay algún giro inesperado que te mantiene entretenido. Pero la película es mala, tramposa y facha como un dolor. Para que se hagan idea, supongo que esta es una peli que puede encantar a los fachas que han llevado a Garzón a los tribunales. Si está usted hasta los belfos de la justicia y creen que lo más maravilloso del mundo sería tomarse la justicia por su propia mano, pues no lo duden más, esta es su película y van a disfrutar como gorrinos en un charco de barro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario