EUROVISION EL RETORNO: GALA 1 por DANA ARANA

Mi padre es eurovisivo y a la vez un egoísta de mierda, que quieren que les diga. Mientras él se va con los amigotes a bares de “esos” a mí me ha dejado encargada de comentarles las galas eurovisivas. Total, que he vuelto a llamar a mis amigas para ponernos a ver el espectáculo y el pasmo que nos ha dado ha sido monumental. Un horror porque incluso nos hicimos unos estilismos preciosos, como pueden ver en la foto del post. Les escribo esto al día siguiente con una resaca enorme y les ruego encarecidamente que nunca mezclen el “Friskies” de salmón y pollo con whisky Dyc, porque no se imaginan ustedes el colocón que da. Si lo llego a saber, me pongo fina de anís.



-La cosa no empezó mal. Salía un co presentador con pinta de loca (es igual que el ex novio de Falete) y de repente aparece Alaska en una carroza entre fuegos artificiales y con Mario Vaquerizo de guardaespaldas. Lulú dice que Mario le gusta mucho porque para ser hetero hace que Susana Estrada parezca un tornero fresador de Segovia. Y eso, según Lulú, es arte.

-Nos presentan al jurado y me entra un miedo en el cuerpo que casi me desmayo. Gracias a Dios por los porros, que a una la tranquilizan mucho. Mariola Orellana tiene un pase, Mario Canut no lo tiene, uno que salía en CQC es como para matarlo y Uribarri es ya como Karina y Massiel, pero con más pene y menos pelo. Saquen ustedes mismos las conclusiones.

-Uno que quiere ser jurado sale a dar el discurso y se arrea tal hostia que acaba en el foso. Los riesgos de eurovisión, chica. Luego eligen a un gordo con pinta de loca y corbata fucsia que dice ser dj y, por lo tanto, sabe reconocer un éxito. Fifí dice que deberían estrangularle en directo y mandarle a Rusia momificado y vestido de Dana Internacional.

-Empiezan las actuaciones y no damos crédito a lo que estamos viendo. El nivel es de fiesta de fin de curso (en un barrio pobre y de sordos), el sonido es demencial, y mira que nosotras ya estamos colocadas y eso agudiza mucho los sentidos, la realización plana y en medio Alaska intentando salvar lo insalvable.

-Terminan las actuaciones y opinamos que Noelia debería ser expulsada del país por ese estilismo, que la rusa debería ser forzada a vivir en pelotas en Ucrania picando piedra, que a los de Atalis deberían decirles que NO estamos en 1984 y al del patito…al del patito deberían introducirle el pato por el recto y después sellárselo.

-Sale Melody y, gafada por el espíritu de la de Azúcar Moreno, no le funciona y micro y tiene que volver a empezar. Melody pone una cara de chunga que da mucho susto y nosotras, muertas de miedo, nos lanzamos al champagne mezclado con lexatín, que se nos va de la mano la ansiedad. Melody hace su número con cinco musculocas en tetas y habla de “los problemillas del directo y de lo mucho que ella agradece el apoyo de su público”. Melody nos da tanto terror que hemos mandado un mail a Hollywood para que la nueva peli de “Viernes 13” la protagonice ella. En plan de víctima, claro. Jason Vorhees debería hacerse un collar con las cuerdas vocales de Melody.

-Se ponen todos a votar mucho y al final quedan clasificados Melody (estamos a punto de matar a alguien), unos que cantan como los Hombres G pero en peor y Noelia, la única mujer capaz de superar los estilismos de Gisela.

El domingo que viene les haré el resumen de la siguiente gala, eso sí a Massiel no le ha dado un jamacuco y se presenta en el plató con varias granadas, una metralleta y una motosierra en el bolso. Massiel, si nos estás leyendo, por favor haz algo.

Miau