Tremenda la foto ¿eh? Les presento a Mónica y Sid, una pareja que debería ser puesta en observación psiquiátrica inmediatamente. El objetivo de ella es convertirse en la mujer más gorda del mundo. Ahora mismo pesa 317 kilos y aspira a llegar a lo 460. Esto ya de por sí es una locura pero esperen que aún hay más. El novio, que es el tarado que aparece junto a ella en la foto, le apoya en esta ida de olla y le alimenta a través de un embudo con una dieta de más de tres mil calorías al día. Porque resulta que la fantasía sexual de Mónica es estar tan gorda que se quede completamente paralizada y él tenga que estar todo el día pendiente de ella alimentándole con el embudo. Y claro, ya se que está lo de las libertades personales y todo eso. Pero a mí me parece que están mal de la cabeza. ¿Y ustedes? ¿Qué harían si Mónica fuese su hermana o su madre?
2 comentarios:
Lo que tu dices, llevarlos a un psiquiatra de inmediato. Eso es un suicidio.
Noooo... directament en un psiquiàtrico..
Publicar un comentario